¡Diviertéte mucho!

Estos son los momentos que me gustaría que me tragará la tierra. Había visto la crueldad pero no tan de cerca.

Quería pasarla bonito contigo, pero tienes una forma tan malvada de decir las cosas que arruinas mi felicidad en todas las dimensiones. Por eso ves, me aislo pausadamente. El vaivén de tus palabras, tus cambios brusco han calado muy hondo en mi. También he bajado mi cabeza y he llorado, no una sola vez, miles de veces. Dejame decirte algo, para ser mujer y aguantarte todos tus desplantes, tu colera, tu ira, tus cambios en los estados de ánimo, tus malos sentimientos, tus juegos, tus borracheras, etc. he tenido que tener un temple y una estabilidad emocional inquebrantable...pero sigo siendo mujer. 

El que me vendieras como una "prostituta" a los tuyos, de esa manera así lo expresastes tu mismo, sangre de tu sangre, fue algo que estuve que superar yo sola. El que te presentarás a mi como otra persona, buscarás intimidar conmigo, con el solo hecho de alimentar tus propios propósitos fue algo desleal. Sin embargo mi identidad inmediatamente yo misma te la informe. Ahora, dime tú, ¿Comó deseabas tu que yo me conduciera, luego de las ofensas?  

 

Gracias a Dios, que tengo que agradecer con toda mi alma, a esos dos grandes hombres que caminan a tu lado. Han sido grandes caballeros. Hombres que admiro y que respeto, han sido grandes apoyo emocional. Piensas que todo esto es "relajo" te vuelves a equivocar, los verdaderos hombres en la vida, no sé conducen como tu. Hablo de la lealtad, de valores morales de tantas cosas hermosas, que aveces uno sola vez en la vida llegan pero el saberlas manejar con respeto y amor, valen más que todo el oro del mundo.

No te niego, que hubieron muchos cambios en mi, fueron observados. Soy tan humana como cualquiera de ustedes y siempre he dicho: En mi mano derecha cargo mi arma, en mi izquierda llevó el puñal y en el centro de mi pecho tengo a Jesús. Quizás dichas estás humildes palabras son insignificantes para ti pero para mi, son de gran valor espiritual.

Y vuelves una y otra vez a equivocarte conmigo. Si mi intensión no hubiera sido sana en todo el sentido de la palabra, ¿crees tu que estaría aquí en este preciso momento?

 

Debes cargar tanto dolor en el fondo de tu alma para poder actuar de está manera. Jamás llamaré literatura a lo que tu haces, destruir a la mujer no es arte. Haz logrado desilucionarme tanto que estoy segura que el día que tenga que partir no te extrañare, ni siquiera como amigo. ¡Diviertéte mucho!

 

Buenaventura para el camino...Sé feliz.

Odalis Feliciano